No es fácil dedicarse a la misma profesión que el padre, cuando éste ha hecho historia. Sin embargo, de vez en cuando, surgen cachorros dispuestos a competir con la sombra de la leyenda paterna. En el mundo del cine los casos son numerosos y los resultados dispares, de todos los colores.
![jugandoconfuego-imagen](https://ghostintheblog.com/wp-content/uploads/foto-jugandoconfuego.jpg)
A Yvan Attal (Tel Aviv, 1965) le gustan los pasajes pantanosos, los personajes en el alambre y las situaciones turbias dibujadas con paradojas de regusto amargo. Actor, director y guionista, de origen franco-tunecino, se diría que esa condición transfronteriza de nómada sin causa, de judío errante afincado en París, adornan una personalidad más excéntrica que singular.
![LACAJADECRISTAL-imagen](https://ghostintheblog.com/wp-content/uploads/foto-cristal.jpg)
Como en «La cizaña» -probablemente una de las mejores aventuras del Astérix original de Uderzo y Goscinny-, en «La caja de cristal» se asiste al inquietante espectáculo de ver cómo un espacio social, aparentemente en calma, comienza a enturbiarse cuando en el armónico vecindario aparece un personaje que siembra desazón, división y envidia.
![argylle-imagen](https://ghostintheblog.com/wp-content/uploads/foto-argylle22.jpg)
A estas alturas, cuando uno descubre el nombre de Matthew Vaughn al frente de un proyecto fílmico, ya sabe a qué se enfrenta. Autor de títulos tan transparentes y poco ambiguos como «Kick-Ass» (2010), «X-Men: primera generación» (2011) y «Kingsman: servicio secreto» (2014), este director londinense nacido al comienzo de los años 70, se mueve con agilidad e ingenio dentro de ese cine con vocación mainstream que mezcla acción con humor, caricatura ácida con aventura destroyer, sabedor de que no debe perder de vista al gran público.