Hollywood y el alma perdida

foto-mapstothestarsTítulo Original: MAPS TO THE STARS Dirección:  David Cronenberg  Guión: Bruce Wagner Intérpretes:  Julianne Moore, Mia Wasikowska, John Cusack, Robert Pattinson, Olivia Williams, Sarah Gadon y Evan Bird Nacionalidad:  Canadá y Alemania. 2014  Duración:  111 minutos  ESTRENO: Marzo 2015

Al canadiense Cronenberg, el mundo de Hollywood le viene bien para reiterar una idea que desde su mismo origen le obsesiona: la enfermedad; la descomposición de la carne y/o la putrefacción del alma. Con la inestimable colaboración del guionista Bruce Wagner, Cronenberg reduce el corazón del cine yanqui a una cartografía de polvo y ceniza. Ningún personaje de los que se pasean por Maps to the Stars merece el regalo de la piedad; ninguno se hace digno de comprensión. Como mucho, los mejores, dan asco y pena.
Maps to the Stars arranca como Mulholland Drive, con la llegada a Hollywood de una joven con hambre de dinero y fama. Su necesidad aparenta ser tan grande como su ignorancia; parece una caperucita a punto de internarse en un bosque donde habita una jauría de lobos dispuestos a engullirla. Con parsimonia pero sin perder el tiempo, con cada secuencia, Cronenberg desvela una nueva figura en un tablero donde nada es lo que dice ser. Un tablero de incestos y maldiciones edípicas, de vanidad y de descomposición.
Su joven protagonista, Mia Wasikowska, la Alicia de Tim Burton; la India Stoker de Park Chan-wook, carga con un cuerpo abrasado y una herida que supura. A sus pies, la galería de personajes no tiene desperdicio. Muchos de ellos se han esculpido con fragmentos de realidad, con referencias que acuden a la memoria de forma que esas semejanzas refuerzan la verosimilitud. En ese descenso a las cloacas del paraíso del cine, Cronenberg extrae lo mejor de sus actores. Por ejemplo: la interpretación de Julianne Moore. El Oscar se lo han dado por Siempre Alice, pero es aquí donde asume su desnudo más terrorífico con un papel de esos que jamás se olvidan. Por lo demás, Maps to the Stars sabe a Cronenberg y nos devuelve al mejor Cronenberg que siempre incomoda e inquieta; un autor heterodoxo que, en los últimos años, parecía haberse sumido en un cine más funcional, más accesible. Para evitar malentendidos sobre su previsible decadencia, nace Maps to the Stars, una envenenada sábana santa de Hollywood. Aquí no hay epifanía alguna; tan solo las campanadas a muerte por la Sodoma del siglo XXI.
Please follow and like us:
Pin Share

Deja una respuesta