Ramona (María Vázquez, Biznaga de plata de Málaga a la mejor interpretación femenina) camina sin aliento. Corre desesperada en un viaje donde no parece fácil discernir si huye de algo y si no llegará a ninguna parte. “Matria”, el filme de Álvaro Gago, empieza en el interior de una fábrica gallega donde se nos muestra a un grupo de limpiadoras a las que Ramona más que dirigir, espolea y ayuda.
La sombra de Hitchcock se cierne sobre un filme extraño si por extraño se significa aquello que nos resulta raro y/o ajeno. Así, el filme protagonizado por Maika Monroe ha sido promovido bajo pabellón estadounidense pero su factura formal, su arco cromático y la geometría inquietante del imperio de los Ceaușescu le confieren al relato un aire europeo, decadente, transilvánico.
La masa madre que da aliento y (con)forma a “Bajo terapia” se encuentra en el libreto teatral de Matías Del Federico, un dramaturgo argentino cuyas obras han encontrado un eco muy favorable. Además de “Bajo terapia”, Del Federico ha escrito “Los amigos de ellos dos”, “Para Anormales” y “Casados sin hijos”, textos con el común denominador de “su” generación que autorretrata, la clase social y los problemas de convivencia. Se trata de reflexiones de vocación popular sobre las relaciones afectivas, los hijos, la sexualidad, sus goces y sus errancias.