Ninguneada por buena parte de la crítica y premio a la mejor dirección en el SSIFF de 2022, “A Hundred Flowers” se legitima con los mejores predicamentos del universo anime. Posee ese toque “hiperemocional” del género, algo menos que un lenguaje, mucho más que un medio pero, al escenificarlo con actores, se adivina que Genki Kawamura no tendrá fácil llegar a su público, ese que mejor sabría apreciar su primera película como director.
A “Un blanco fácil” lo que le da sentido, le aniquila. Basada en hechos reales, una vez más, la servidumbre a lo inmediato y el miedo a la posible denuncia si se proyectan acusaciones nominales al poder -con o sin pruebas-, terminan por matar a la verdad. Es muy probable que los hechos, en su inmensa mayoría, transcurrieran como Jean-Paul Salomé muestra.
Se ha recibido a “El maestro jardinero” como la entrega final de una trilogía formada junto con “El reverendo” (2017) y “El contador de cartas” (2021). Se olvidan de que Paul Schrader permanece siempre encadenado a sí mismo, siempre atravesado por la misma angustia. Su cine parece un rosario que cuenta a cuenta, recita la misma letanía: un lamento epifánico sobre la redención y la culpa.