“La casa Gucci” nació, al parecer, gracias al olfato de la esposa de Ridley Scott quien, tras tener noticias del libro de Sara Gay Forden, entendió que allí había materia para una película importante. Así que, para garantizar su importancia, Ridley Scott puso todo su empeño para enrolar a un reparto impresionante.

El caso de Rodrigo Cortés merece una atención especial. Especial es que, siendo todavía un adolescente, mientras el resto de la clase memorizaba las alineaciones de los equipos de fútbol, él filmaba sus dos primeros cortometrajes titulados “El descomedido y espantoso caso del victimario de Salamanca” y “Siete escenas de la vida de un insecto”, éste último bajo el influjo de Kafka.