El 24 de julio de 1982 me enfrenté a mi peor entrevista. Faltaban cuatro horas para el concierto de Nina Simone en Pamplona. Ella era un mito y yo acaba de cumplir mi primer trimestre como profesional del periodismo.

Para abrir el apetito y estimular la presencia del público, las gacetillas periodísticas y los reclamos publicitarios han hablado de muchos referentes a la hora de presentar el estreno de “El robo del siglo”. Basada en un hecho real, un sofisticado atraco a un banco argentino en 2006, su argumento recuerda a multitud de películas.

Cuatro historias y un “leitmotiv” articulan este filme de filmes que ganó el Oso de Oro a la mejor película de la Berlinale 2020. Se trata de cuatro relatos atravesados por la mancha que salpica a los sayones, o sea el sentimiento de culpa que muerde a los encargados de ejecutar a los reos de la ley sabedores de que la ley no coincide con lo que cabría esperar de la justicia.