Se cumplen 22 años de “Memento”, un filme referencial con el que despegó el talento de Jonathan Nole y en el que se encumbró la figura de Guy Pearce. La efeméride no es ajena a lo que “La memoria de un asesino” dirigida por un Martin Campbell desfondado, parece pretender. Ambos filmes giran sobre la fragilidad de la mente.