Ya en un cortometraje anterior, “Submarino”, 2016, Mounia Akl y Clara Roquet, directora y coguionista, se asomaban a la denominada crisis de la basura en Líbano. Son tiempos de suciedad. También allí estaba la actriz Yumna Marwan.
En 1986 Chernobil se abismaba en el holocausto nuclear. En esos meses EE.UU. bombardeaba Libia y la América que habla español se veía atravesada por “senderos luminosos” de sangre y fuego. También ese año, en el país del reloj de cuco, moría Borges, cerca de donde, once años antes, se despidió Chaplin.