Su primer largometraje, «Carmen y Lola» (2018), tuvo una acogida extremadamente favorable. Cannes la seleccionó para su Quincena, le llovieron nominaciones al Goya y el público y la crítica la saludaron como una gran promesa. Arantxa Echevarria venía del mundo del cortometraje y la publicidad.
Manuel Martín Cuenca cultiva evidentes virtudes y con ellas ha conformado un singular y reconocible verbo cinematográfico. Sin embargo, por diferentes razones, su figura y su obra no ocupa el lugar del escaparate que merece orillado por nombres de menor interés pero de mejores envoltorios.