Ciertamente los protagonistas de “La consagración de la primavera” de Fernando Franco ya han pasado de la adolescencia según el canon imperante en el tiempo de Igor Stravinski. Pero hoy la adolescencia se prolonga sin fin en el refugio de la casa materna; de modo que Laura y
David perfectamente pueden representar esa danza de los adolescentes que se baila en “La consagración”.
En la próxima primavera David Cronemberg cumplirá 80 años. El marciano de Toronto entrará en su novena década sin ceder, ni cambiar, un milímetro. “Crímenes del futuro”, como buena parte de su obra anterior, provoca reacciones de estupor, incomodidad, rechazo, asco, perturbación…y una enigmática atracción. Siempre ha sido así por más que luego sus películas no pierden su magnetismo sino que crecen como semillas germinales que alimentan incontables sueños y pesadillas de otros.
La reacción que “Argentina, 1985” provoca, depende de la tolerancia de quien la mire hacia el populismo y la sátira. El tema, que huele a sangre y despierta al dolor, aborda el juicio a Videla y su plana mayor; el proceso y condena al genocidio que la junta militar argentina practicó en los 70.
En el año de la mejor sección oficial, el jurado pasará a la historia, al menos en la memoria de unos cuantos, por haber tomado, inquietantemente, la peor decisión posible. Ignorantes de que cuanto más se llena la barriga, más torpeza se le agrega a la cabeza, tras su visita al Arzak, el jurado falló superlativamente; atentó contra la sensatez, insultó al conocimiento y se olvidó de impartir justicia creyendo que hacía lo correcto.
La personalidad cinematográfica de Neil Jordan desconcierta. Siendo singular, todo sujeto debe o al menos puede serlo, sufre del mismo mal que afecta a buena parte de los cineastas británicos. A diferencia de los estadounidenses, en Gran Bretaña, los realizadores del Reino Unido se comportan como orquídeas de floración impredecible.
El director chino Wang Chao cerró la sección oficial La leve discreción de lo ya visto La última película de la sección oficial del […]
“Victoria”, esa referencia femenina de ecos militares y ADN masculino, es el nombre de la ciudad experimental y utópica en la que habitan lo ciudadanos de la colonia feliz en la que transcurre el relato de “No te preocupes querida”.
Con Jaume Collet-Serra, Isabelle Furhman supo abrirse camino en el mundo de la interpretación cinematográfica. Ella encarnaba a la protagonista, una niña de origen incierto, acogida por una buena familia. Había sido adoptada para tratar de llenar el vacío de una muerte prematura
Como acontece en la celda donde se hacinan sus dos principales protagonistas encarnados por Miguel Herrán y Javier Gutiérrez, todo se dirime en dos niveles antagónicos. Así, en el camastro de arriba, el primero, Manuel, un contable pendiente de un juicio que nunca llega, escribe panfletos pidiendo respeto por los derechos y amnistía para la gente encarcelada
Si la sombra de la religión en el filme de Lelio se extiende como manto de desconocimiento y manipulación que ciega a los hombres, en la última obra del siempre radical y sin embargo nada rompedor consigo mismo, Hong Sangsoo, también se nos habla de dios.