Palabras, palabras, palabras Título Original: EASY VISTUE Dirección: Stephan Elliott Intérpretes: Jessica Biel, Colin Firth, Kristin Scott Thomas, Ben Barnes, Kris Marshall, Kimberley Nixon y Katherine Parkinson Nacionalidad: Reino Unido. 2008 Duración: 97 minutos ESTRENO: Enero 09

Escuchar diálogos brillantes cargados con la mortífera pólvora de la inteligencia es un extraño placer del que el cine actual ha renunciado en buena medida. ¿Por qué los autores del siglo XXI temen tanto a la palabra? De ella huye no sólo el cine de acción y vacío, cine espectáculo al servicio del espejismo digital, sino también el cine de compromiso, el cine de la mirada íntima y el ritmo pausado. ¿Por que entre el plano general colonizado por los fuegos artificiales y el primer plano de una nuca presumiblemente ensimismada existe un encadenado de ausencia de palabras? Los mercenarios y los artistas se han puesto de acuerdo: callan. Se dirá que cineastas posmodernos como Tarantino llena sus guiones con páginas interminables de palabras. Y se dirá bien, pero en Tarantino las palabras no dialogan, son a lo sumo, bocanadas deliradas por personajes que no es que no se miren es que no saben, no logran verse.
La familia de este filme que lleva semanas aguantando en el fondo de la cartelera posee una única virtud: sabe engarzar frase tras frase en un juego pirotécnico y aparentemente frívolo, pero mucho más corrosivo de lo que aparenta. Hay una razón de peso, Noel Coward, un dramaturgo y actor con el que empezó un cineasta como David Lean y con el que ahora recibimos la sorpresa de reencontrarnos con el autor de las aventuras de Priscilla, la Reina del Desierto, Stephan Elliot. Pues bien, el viejo texto de Coward, llevado al cine mudo por el mismísimo Hitchcock, renace bajo la dirección de Elliot en un filme intenso y divertido que se beneficia de dos viejas virtudes: un reparto actoral en el que todos son solventes intérpretes y un duelo femenino de esos que causa regocijo y admiración.
Tras la afilada disección que, el entonces todavía joven Coward (tenía poco más de 25 años cuando la escribió) realiza de la high class británica, ya descansa la admirada redención que conforme se hizo mayor sufriría el entonces beligerante dandy. Elliot que en esto se identifica con Coward, alumbra un filme que pertenece con dignidad al súbgénero de cine de amor y lujo. Dicho de otro modo: Humor británico de lenguas rápidas y mentes afiladas ebrias por el combate incruento del ajedrez de la alcoba familiar. De eso va está película.
Please follow and like us:
Pin Share

Deja una respuesta