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Risa y asco en Susurro
Título Original: XP Dirección: Sergi Vizcaíno Guión: Daniel Padró Intérpretes: Amaia Salamanca, Maxi Iglesias, Luis Fernández, Úrsula Corber, Óscar Sinela, Miguel Ángel Jenner y Alba Ribas Nacionalidad: España. 2011 Duración: 86 minutos ESTRENO: Enero 2012
¿Es posible fundir los románticos suspiros de arrobo adolescente con los escalofríos de un gore grotesco, en 3D? Demostrar lo disparatado de ese experimento alimenta la semilla germinal de la que brotó XP. La genial idea era de perogrullo. De un lado enrolar rostros televisivos con mucha física y química a bordo. Del otro, dado que el miedo sienta bien al acné descerebrado, bastaría con saquear el género de terror y encima anunciar que se trata del primer filme de sustos españoles en 3D. Genial. El resto, o sea XP, son 86 minutos forjados para sembrar el estupor y el tedio. Casi hora y media que da forma a un largometraje increíble del que mejor sería no decir nada porque todo cuanto se pueda decir redunda en una obviedad: bebe de todas las fuentes pero siempre está sediento, ¿qué es?: La falta de vergüenza y la carestía de talento.
El guionista, Daniel Padró, se lo ha trabajado. Tiene pretensiones y no le tiembla el pulso. En XP, título ¿enigmático?, se adivina una lectura arrebatada, o sea robada de cualquier trabajo enciclopédico sobre cine de terror. Con ello, se pone en marcha un argumento convencional: seis jóvenes estudiantes, de psiquiatría en su mayoría, acuden a un extraño pueblo llamado Susurro para investigar si el espectro de un doctor asesino sigue en activo.
Con ello, el debutante Sergi Vizcaíno rodó el filme con su maletín lleno de dvd´s inspiratorios. En su afán de inspiración, Vizcaíno ata El gabinete del doctor Caligari con Resident Evil, del cine clásico del origen, al no cine del videojuego. Tanta referencia podía haber sostenido un producto extraño, e incluso interesante, de haberse respetado la materia actoral. Pero en su afán de ganarlo todo, XP utiliza un reparto que, a los cinco minutos de comenzado el filme, despierta un sentimiento común en todo espectador sensato: desear que aparezca pronto el psicópata y acabe con ellos. Lógicamente algo así acaba pasando, pero con dos imperdonables lastres: tarda mucho en cumplir con su tarea y se le va la mano en la crueldad, lo que hace que la mayor parte de sus jóvenes clientes no soporten ver a Maxi Iglesias, Úrsula Corberó, Luis Fernández, Óscar Sinela, Amaia Salamanca y Alba Ribas con las vísceras fuera, con la cara machacada y con el cráneo taladrado. ¡Qué risa y cuánto asco!